TRÍPOLI. Choques armados estallaron al sur de la capital libia entre una alianza progubernamental y fuerzas leales al mariscal rebelde Jalifa Haftar, informaron fuentes de ambos bandos.
Una fuente del gobierno reconocido por la comunidad internacional aseguró que los enfrentamientos iniciaron a 50 km de Trípoli, capital del país africano.
El gobierno asentado en la capital de Libia, respaldado por Naciones Unidas, aseguró haber recuperado el control del antiguo aeropuerto de Trípoli, horas después de que fuera tomado por las fuerzas encabezadas Haftar, leal al gobierno asentado en el este.
Esta mañana, milicianos procedentes de la ciudad de Zawiya, apoyados por unidades de la "Fuerza de Protección de Trípoli", una de las milicias más poderosas de la capital, lograron frenar el avance del LNA en el llamado "puesto de control 27", en Wershiffar, a cincuenta kilómetros de Ghayan y 30 del centro de Trípoli.
Las milicias de la fuerza capitalina capturaron, además, a un centenar de hombres y destruyeron una hilera de vehículos artillados facilitados a Hafter por Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, sus principales aliados políticos.
Combates similares se libraron en el área de Suq al Khamis, área de acceso a la capital desde el sur, ahora bajo control de las fuerzas del este, y la región oriental de Waddan, clave para el movimiento de las tropas de Hafter desde el oasis de Jufra.
Según responsables de Seguridad en el puerto de Misrata, tercera ciudad en importancia del país, sus tropas lograron hacerse con el control de varias posiciones
El mariscal tampoco ha logrado aún el control de la estratégica localidad de Zintan, esencial en el frente oeste, dividida entre las milicias que apoyan a Hafter y aquellas aún fieles al general Al Jawili, fiel al gobierno en Trípoli.
Sí recibió hoy el respaldo del movimiento salafista radical Madkhaki, fuertemente implantado en la capital y financiado por Arabia Saudí, que llamó a sus seguidores a unirse a la yihad de Hafter "contra el terrorismo".
De lograr el control de Trípoli, Hafter, miembro de la cúpula militar que en 1969 aupó al poder a Muamar al Gadafi, reclutado después por la CIA y convertido en su principal opositor en el exilio, se convertiría en el hombre mas poderoso del país, solo contestado por la ciudad de Misrata.
Libia lleva sumida en el caos desde la caída del régimen de Gadafi en 2011 a raíz de un levantamiento popular y de la intervención de la OTAN. En la actualidad, cuenta con dos gobiernos, el afincado en Trípoli y reconocido a nivel internacional, y el que tiene su sede en Tobruk. El Consejo de Seguridad de la ONU pidió a las fuerzas libias detener su avance, advirtiendo que el movimiento militar estaba poniendo en riesgo la estabilidad de Libia.