Los Cabos, Baja California Sur.- Es tan sólo una jovencita de 17 años, dijo la angustiada mamá a los agentes de Seguridad Pública, y está desaparecida, salió corriendo de su trabajo sin dejar más rastro que unas servilletas de papel con la leyenda “Suburban blanca”; y otra que reza “Me están vigilando, no puedo decir nada más”.
La repentina salida de su trabajo de la joven fue a alrededor de las 12:00 horas, y ya eran las 15:00 horas y no todavía no se sabía nada de ella, se reportó a Seguridad pública, siendo el propio capitán, Juan José Zamorano, director de la corporación en Los Cabos, quien personalmente estuvo atendiendo la situación, tranquilizando a los familiares, y dando seguimiento a la situación.
Explicó el capitán Zamorano, que seguramente se trataba de una extorsión telefónica, por la forma en que actuaron, primero asustaron a la joven, la mandaron a un lugar donde estuviera sola, y la hicieron que comprara un chip nuevo para el celular, y la amenazaron de que le va a pasar algo a ella y a sus familiares.
Luego llaman al papá y le piden dinero, en este caso fueron 80 mil pesos, si quería volver a ver a su hija con vida, el papá confiesa que sólo cuenta con 30 mil pesos a la mano, le piden que deposite de inmediato, lamentablemente no se le pudo avisar con tiempo al papá que se trataba de una extorsión, a consecuencia de que los delincuentes le piden que se mantenga en línea, y no corte la llamada telefónica, precisamente para que nadie le dijera que no lo depositara.
Cuando al fin pudo la madre comunicarse vía telefónica con el papá a otro número de celular de la joven, ya había depositado 40 mil pesos, y le estaban pidiendo más dinero, pero se le informó por parte del comandante de la Policía, que si no podía cortar la llamada del celular del lugar de donde procedía la extorsión, que lo apagara, fue como cortó todo contacto con estos delincuentes, lamentablemente fue una víctima más.
La joven por su parte, siendo a alrededor de las 18:00 horas que se comunicó con la mamá, diciéndole que estaba en una plaza comercial y tenía miedo que le hicieran algo si se salía de allí, pero se le ánimo y tomó un taxi rumbo a su casa, en buen estado de salud, sólo con el susto de ella y sus papás, además de que habían perdido 40 mil pesos, la delincuencia había logrado su objetivo.
El director de Segurida Pública, capitán Juan José Zamorano, invitó a la gente a no caer en este tipo de extorsiones, ya que es tan sólo una forma de robar dinero, hay que guardar la calma, buscar la manera de investigar donde está la persona que se dice secuestrada, y no contestar si es un número desconocido, o si contestan y le dicen que un familiar está secuestrado, colgar de inmediato, ya que está a punto de ser víctima de una extorsión telefónica.